4 may 2009

Entre moños y huaraches


Regresando a Xhiluca influenzados
Este domingo como ya es costumbre Xsur no dejo de rodar, y ni el nivel 5 de influenza nos hizo dejar de rodar eso si todos en buenas condiciones de salud y con tapabocas, es mas fue un domingo de rodada doble, una parte de Xsur se fue a Tehuacan a marcar territorio y buscar dinosaurios, la otra parte nos fuimos a Xhiluca, a lo que prometía seria una rodada leve pero sustanciosa con huaraches y hamburguesas al final, pero hasta ese momento no sabíamos la sorpresa que nos tenían preparada nuestros amigos y hermanos José Luis y Víctor Flores (no el Víctor F. que todos Uds. conocen, sino el Víctor Flores tocayo de el otro Víctor F., bueno Uds., me entienden, verdad?).
La cita fue en el Ángel, pero pasamos primero al Seven en ruta, todavía teníamos 5 minutos, íbamos Laus, Víctor M. y Fiurer, ahí nos alcanzo Diego, que venia muy contento de que no venían mas niños que lo opacaran, ya aprovisionados nos fuimos al Ángel, ahí fueron llegando poco a poco los demás ciclistas, José (con carro), Héctor (con su primera rodada con Xsur), Antonio Ceja (con auto lleno de familia que lo acompañaban), Rodrigo (que ya es Xsur frecuente), y de ultimo momento Bary (que anduvo desaparecida un buen rato y que venia presumiéndonos su nueva figura con unos cuantos kilos de mas); hasta este momento nos dimos cuenta que éramos mas de los que podíamos caber cómodamente en los 2 autos con espacio, pero Diego tenia la seguridad que Pipo vendría, según el ya habían quedado, le hablo y para no variar estaba perdido pero en el País de los Sueños, no iba a llegar, ni modo a acomodarnos como pudiéramos, José se llevo a un Cleto y 3 bicis, yo tuve que implementar en ese momento el “auto sardina”, me lleve a 5 ciclistas y las demás cletas, lo bueno que Laus y Bary iban en mis piernas, bueno casi (lo que es la imaginación mañanera) iban las 2 en el asiento delantero, como pudimos llegamos a Xhiluca, en donde encontramos a José Luis, Víctor F. y Edgar.
Ya listos todos, bueno casi porque Héctor con su primera rodada y con la emoción que le causo rodar con Xsur, al estar probando su cleta le rompió el manubrio, y ya no pudo hacer completa la rodada, nos acompaño un poco de subida para después irse en solitario y esperarnos en Espíritu Santo, Víctor F. nos pregunto si queríamos hacer una variante, darle la vuelta al Moño, todos asentimos sin saber en la que nos metíamos y empezamos a subir, subir y subir, hasta llegar a la parte alta, entre veredas, bosque, vistas espectaculares y un sol que nos iba quemando hasta los huesos, esta variante le aumento varios kms a la rodada que originalmente teníamos planeada, y la mayoría fueron de subida, en total fueron casi 30 kms, muy buenos, muy buena rodada, excelente ambiente (como siempre) y además de premio los huaraches y hamburguesas.
Ya en la parte alta hicimos una pequeña pausa para empezar la bajada, una muy buena bajada con mucha inclinación pero toda rodable, pasamos por las minas y ahí ya atravesamos el río para tomar el camino por el bosque, ya conocido, hasta llegar a los huaraches, después de saciar nuestra hambre y sed, nos preparamos para bajar a los autos por camino ancho, todos iban muy contentos por creer que esa bajada nos llevaría hasta los autos, pero no, faltaban las pavorosas S’s y ya no había forma de catafixiarlas, a sufrirle, para colmo el sol estaba en su mayor punto y el polvo (tal vez con influenza) estaba muy suelto, sanos y salvos llegamos a los autos como polvorones pero muy contentos y satisfechos de esta rodada, todos al borde del cansancio, unos mas que otros.

Aprendiendo
En esta rodada aprendimos que :
- Laus en medio de la paranoia no saludo a nadie de mano y menos de beso (ni de lengua), la influenza nos cambia, al final de la rodada Diego y Führer le dieron su merecido, abrazándola y dándole besos por todos lados (en el buen sentido de la palabra).
-Bary después de no rodar por un buen rato venia presumiendo look, al preguntarle por su dieta, dijo que solo dejo de rodar con Xsur (obvio).
-No hay que emocionarse tanto en la primera rodada, puedes romper tu manubrio.
-Pipo, duérmete temprano para que no tengamos que implementar el “auto sardina”.

Ya al final, con las cletas de nuevo en los autos, nos despedimos de Antonio que todavía tenia que rodar para encontrar a su familia mientras los demás nos fuimos a deleitarnos con unas exquisitas hamburguesas, algunos ya no alcanzamos a comérnosla y las llevamos a casa como trofeo de rodada.
Muchas gracias a José Luis y a Víctor F. por ser nuestros flamantes guías esta vez, la verdad que el esfuerzo valió la pena y como Xsur nunca descansa nos vemos el próximo fin de semana, tal vez rodaremos en sábado por ser el Día de las Madres el domingo, esperaren detalles mañana, hasta entonces…El Fiurer

PD: ¿Alguien quiere churrumaiz?

1 comentario:

Anónimo dijo...

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